"Sin duda le llamarán para interrogarle. Este es un caso que ha atraído la atención de la prensa. La policía tendrá que poner las cosas en su sitio. Sin embargo, Bieber no está legalmente obligado a hablar con la policía. Él está dispuesto a hablar con ellos, aunque siempre bajo la supervisión de sus abogados", declaró la abogada Anahita Sedahgatfar, persona no vinculada al caso, al canal estadounidense Fox News.
Según la letrada, es poco probable que este caso pueda llegar más lejos sin el testimonio del artista, "La policía necesitará tener su versión de los hechos para poder determinar si se debe desestimar el caso o llevarlo a los juzgados. Debido a la falta de pruebas, no se pueden presentar cargos contra el artista", señaló.
El ídolo juvenil ocupó los titulares el mes pasado después de ser acusado de agredir al paparazzi José Sarros tras un ataque de ira. Según los testigos, Sarros estaba bloqueando la salida del coche de Justin quien pretendía abandonar el centro comercial con su novia, Selena Gómez. Posteriormente, el fotógrafo fue atendido en un hospital por heridas leves.
Justin no ha querido hacer ningún comentario al respecto, pero el sheriff de Los Angeles afirma que el caso está aún abierto.
